CULTURALES/EX HACIENDAS/HACIENDA LA CHAVEÑA . : - : . 2 páginas; usa las flechas
Otra de las haciendas que se construyo en el municipio de Tepetongo es la de La Chaveña propiedad de la familia Escobedo
Las haciendas hasta el año 1910 fueron un emporio productivo, en donde cada hacienda era todo un sistema de producción.
En ellas había carpinterías, herrerías, tenerías, talabarterías, molinos de trigo que se movían con turbinas de las presas que luego utilizaban el agua para riego.
También se producían pastas alimenticias, construían sus propias herramientas como carretas y ajuares para mulas que tiraban de ellas, así como muchas otras actividades de lo cual solo quedan ruinas.
Estas haciendas después de la revolución de 1910 fueron quedando poco a poco en el olvido como sistemas de producción.
Sobre la carretera que lleva al Salitrillo, aproximadamente 5 kilómetros de la cabecera encontramos los restos de lo que fue la hacienda de la Chaveña.
Sus muros ya deteriorados y pisos de piedra son mudos testigos del paso del tiempo, solo un pequeño gato delata que todavía se habita parte de esta hacienda.
Hoy solo queda ruinas de estas haciendas, que a partir de la revolución y después del reparto de la tierra para los ejidos, esto quedo en el abandono.
Entre paredes de adobe y habitaciones encontramos parte de la historia de Tepetongo.
El abastecimiento de agua es siempre un asunto de vital importancia por lo cual muchas de las haciendas contaban con sus pozos que les suministraban agua.
Dado que las haciendas fueron construidas para durar varios siglos, encontramos como van conviviendo los diversos avances tecnológicos ya que junto al pozo tenemos una bomba manual para suministrar el vital líquido.
Todavía en la Hacienda de la Chaveña están en pie sus bodegas, las cuales almacenan el material empleado en la antigüedad que es el Adobe.
Actualmente funciona como propiedad privada y se mantienen en buen estado partes de ella.
Por la distribución de la casa podemos percatarnos que funcionó como la casa grande, posiblemente de alguna hacienda o estancia agrícola.
También encontramos las caballerizas que por mucho tiempo albergaron a los caballos, que fue el único medio de transporte en el campo zacatecano.
Hoy los caballos son una especie animal cuyo uso está ya muy limitado a las actividades agrícolas en las áreas rurales. Es imposible desligar la vida de las haciendas y el empleo de los equinos.