Un 19 de junio las calles de Zacatecas se llenaron de gente que junto con el cielo, lloraban la partida de uno de los iconos más grandes de la música y el cine mexicano.

Antonio Aguilar Barraza nació en Villanueva y fue en esa tierra donde decidió descansar.

La tumba se encuentra dentro del Rancho El Soyate, se puede acceder a ella, es cosa de tocar a la puerta y esperar una respuesta.

En una pequeña colina se levanta una gran cruz blanca, misma que podemos apreciar sobre carretera, en el interior del mausoleo está una serie de objetos que representan lo que en vida fue.

El libro de visitas tiene registradas las palabras no sólo de mexicanos, si no de extranjeros que pasan por ahí y se sienten obligados a hacer la visita.

La tumba de Antonio Aguilar es una tumba sencilla en la cual están las imágenes de la Virgen de Guadalupe y de San Judas Tadeo, así como la montura que uso en sus espectáculos ecuestres.

También están las fotografías de madre y padre, así como su traje de charro, todo ello para recordar al Charro Zacatecano Antonio Aguilar.