La hacienda de la purísima de Carrillo se encuentra al oriente de Valparaíso.
Para llegar hay que tomar la carretera que lleva de Lobatos a Monte Escobedo, luego tomar la terracería de algunos dos kilómetros.
De la hacienda queda sólo el templo en pie, pues los restos de la casa grande recientemente colapsaron debido al paso del tiempo y el abandono.
Lo que aún queda en pie por completo es el templo que sobresale entre los alrededores por su torre de cantera perfectamente labrada.
Según inscripciones de la misma fachada, la fecha en que se terminó de construir el templo fue el 12 de octubre de 1905.
Y es en esta fecha cuando se celebra la fiesta patronal. Movida a la fecha recientemente para celebrar a la virgen y la erección del templo.
Afortunadamente en recientes años el templo entró en un programa del INAH para su restauración y mantenimiento. Por lo que se espera en poco tiempo esté en condiciones de ser visitado.
Del templo se puede decir bastante. Pero sobresale la única torre central en cantera labrada de estilo ecléctico. Adornada por hongos amarillos que a través de los años se han formado en la cantera.
En el interior, el templo es de una sola nave en forma de cruz latina, con un coro a la entrada y rematando en un altar de madera estofada y detalles en lámina de oro.