Es de gran importancia la capilla construida en este lugar, la cual data del siglo XIX, y en cuyo atrio se encontraba un panteón, costumbre común en los templos y capillas construidas en dicho siglo, en el cual los habitantes al momento de morir eran sepultados ya sea dentro del templo o afuera en el lugar conocido como atrio, de esa práctica ahora sólo quedan algunos epitafios gravados en mármol y cantera.