Su existencia se debe a la iniciativa de Don Higinio Escobedo Zauzo.

Quien en el año de 1867 inicia su construcción.

Que fue continuada por el H. Ayuntamiento concluida a finales del siglo XIX.

Este debe su nombre a Don José María Hinojosa.

Uno de los jefes políticos que empeñosamente llevaron a cabo su edificación.

En su fachada en elocuente simbolismo están presentes las clásicas combinaciones de los números cinco y tres.

Para iluminar el interior se manejaron una serie de lámparas a base de carburo.

A las que daba vigor un gran espejo en el techo para reflejar sus flamas.

El recinto sirve de escenario para todo tipo de actividades.

Tanto culturales como sociales y políticas como: obras de teatro, graduaciones, conciertos, festivales, concursos y exposiciones.

Al mismo tiempo exhibe lo mejor de la obra y arte jerezano.

Cuando comenzó la era de la cinematografía, este teatro, como tantos otros.

Fue espacio idóneo para las primeras proyecciones por su capacidad y manejo de la iluminación.