Aquí, es en la víspera, día de todos los santos, cuando desde el atardecer grupos de niños, jóvenes y hasta mamás con su bebé en brazos continúan con esta bella tradición de salir a pedir el muerto recorriendo las calles y los comercios, donde al presentarse cantan el epitafio tradicional de el muerto pide camote, si no se le cae el bigote, la viuda pide una ayuda, para sus pobres criaturas, lo cual es precedido por los vecinos al obsequiarles fruta, dulces, camote o calabaza cocida, elotes o una moneda.